La fatiga visual es una condición oftalmológica que se manifiesta al realizar actividades que requieran un elevado nivel de concentración visual, como por ejemplo, en viajes largos al prestar atención a la cartera o por largos periodos de exposición a la pantalla de dispositivos electrónicos.

Síntomas de la fatiga visual

Los principales síntomas de este trastorno visual son picor, dolor o escozor en los ojos, sequedad o exceso de lágrimas, visión borrosa o visión doble, dolor de cabeza, dificultad para concentrarse o mantener los ojos abiertos.

Estos síntomas pueden presentarse de manera individual o más de uno a la vez.

Causas y tratamiento

Una de las principales causas, que además está cada vez más presente en nuestras vidas, es la exposición prolongada a dispositivos electrónicos. Estar demasiado tiempo frente a una pantalla nos genera una gran fatiga visual.

La lectura continuada y prolongada en el tiempo, pese a ser una actividad altamente enriquecedora, requiere gran concentración visual a una distancia corta.

Otras situaciones que pueden causarnos esta fatiga son:

  • Conducir por largo tiempo sin hacer alguna de las paradas recomendadas cada 2 horas.
  • Esforzarse por ver con una luz demasiado tenue.
  • La exposición a una luz muy intensa.
  • Enfrentarse a situaciones estresantes.
  • Cansancio físico y mental.
  • Fuertes ráfagas de aire.

La principal solución y la forma más sencilla de acabar con las molestias producidas por este problema es el descanso de la visión, permanecer en un sitio donde haya poca luz y con los ojos cerrados para ayudarlos así a descansar. Otras recomendaciones que nos ayudan a sentirnos mejor son: la aplicación de frío en la zona de los ojos un ligero masaje a con una crema hidratante.

Prevención

La mejor prevención es evitar las situaciones que lo producen, sin embargo, es muy difícil evitar ciertas situaciones en nuestro día a día, por esta razón te facilitamos una serie de indicaciones que te ayudarán a combatir la fatiga visual.

El principal factor es la luz. Esta debe ser adecuada en función de la actividad realizada. Para estudiar debemos asegurarnos de contar con bastante luz; sin embargo, para estar con el ordenador es recomendable que la pantalla no tenga el brillo muy alto.

El otro gran factor que ayuda a prevenir el cansancio visual es realizar descansos. Es importante, que sea cual sea la actividad que se realice, no se lleve a cabo durante tiempos prolongados, es recomendable ir tomando pequeñas pausas.

Por último, también en relación con las pantallas, un gran aliado que reduce la fatiga visual son las gafas con filtro para luz azul. Este tipo de luz afecta mucho a la vista y provoca que, al cabo de un cierto tiempo, aparezcan los primeros síntomas de la fatiga visual. Las gafas con filtro son una gran ayuda para este problema, sobre todo ahora que pasamos tanto tiempo frente a pantallas en clases o reuniones online.

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