En verano pasamos una gran cantidad de horas expuestos a los rayos luminosos del sol y olvidamos llevar a cabo una rutina de cuidado continua para mantener a salvo cada parte de nuestro cuerpo, evitando así posibles daños y enfermedades. Es muy importante proteger nuestros ojos en verano haciendo uso de los recursos adecuados, ya que estos están expuestos diariamente a una gran cantidad de factores que poco a poco los debilitan. ¡A continuación, descubrimos los cuidados que podemos llevar a cabo para proteger nuestra vista del sol durante esta temporada!

¿Qué daños pueden tener nuestros ojos en verano?

Si no cuidamos nuestra vista cuando estamos tomando el sol durante el verano, es posible que experimentemos algunas afecciones, como por ejemplo vista borrosa o enrojecimiento del ojo. Además, el sol puede causar daños más extremos como la inflamación de las córneas o la irritación ocular.

¿Cómo podemos proteger nuestra vista del sol en verano?

Es fundamental protegernos ante la exposición al sol, por lo que serán imprescindibles unas gafas solares de calidad que cuenten con la homologación correspondiente que garantice la seguridad en la exposición frente al sol. También puedes optar por otros elementos que te resultarán de gran utilidad, como por ejemplo las gorras o los sombreros.

Si utilizas lentillas, es importante que las retires antes de ir a una zona de piscina o playa, ya que bañarte con ellas puestas puede ocasionar graves infecciones .

Hay que tener cuidado con las cremas solares, puesto que muchas veces, al ponerlas en la cara y bañarnos, pueden caer sobre los ojos, introduciéndose dentro y causando escozor y enrojecimiento. ¡Ten cuidado y emplea los protectores con precaución!

Aunque no lo parezca, uno de los principales motivos que causa sequedad en los ojos son los aires acondicionados por el frío que desprenden. Lo mejor es hidratar nuestros ojos con lágrimas artificiales para así asegurarnos de que no vamos a desarrollar ningún problema.

Si a estas alturas ya has sufrido consecuencias debido al sol o a la piscina, te recomendamos acudir a los especialistas, ya que ellos te darán la solución que necesitas ante cualquier tipo de problema.

Es importante que usemos unas gafas de sol que prevengan las diferentes problemáticas que podemos padecer tras la exposición a los rayos lumínicos. Para ello, debemos buscar modelos que tengan un filtro de protección alto. Dependiendo del uso al que estén destinadas, encontraremos diversos filtros de protección que comprenden una escala entre 0 y 5. Además, es necesario que nuestras gafas posean cristales de colores que filtren la luz ultravioleta del sol, pues así garantizamos una mayor protección ante los rayos del sol.

En conclusión, proteger tus ojos del sol durante el verano es fundamental, ya que la vista es uno de los sentidos más valiosos. Si quieres más información, ¡no dudes en contactar con nosotros!

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